Han tardado pero ya es oficial. Netflix ha anunciado la renovación de 'Dark', la serie alemana que ha sido comparada con 'Stranger Things'. Tiene elementos comunes (en realidad coinciden al beber de Stephen King) aunque es más seria y adulta. Más europea.
También pareció más aburrida que 'Stranger Things', con una primera temporada demasiado alargada, con desvíos y explicaciones que sobran. Hasta el último par de episodios es bastante lenta y repetitiva, dando vueltas sobre lo mismo, pero al final se pone realmente interesante, avanza con un ritmo normal y empieza a resolver cuestiones... y entonces termina, siguiendo la tradición de los estadounidenses, con un tremendo cliffhanger.
La desaparición de dos niños en el pueblo alemán de Winden abre abismos que trastocan nuestro concepto del tiempo. La cuestión no es quién ha secuestrado a los niños, sino cuándo...
'Dark' fue creada por el director suizo Baran Bo Odar —'Das letzte Schweigen', 'Who Am I', 'Sleepless'— y los productores de la ganadora del Óscar 'La vida de los otros' ('Das Leben der Anderen'). "Tuvimos absoluta libertad creativa. Pudimos fichar a los actores que quisimos, los actores que mejor encajaban con los papeles. Netflix nos dio un presupuesto, un par de notas y nos dejó hacerlo", declara Odar.
Como de costumbre, Netflix no ha facilitado datos de audiencia pero afirma que 'Dark' es "uno de los shows de habla no inglesa más vistos" de su servicio global. Los creadores de 'Dark' han publicado esta nota con un mensaje a todos sus seguidores:
"Estamos impresionados con la respuesta que está teniendo 'Dark' y emocionados de que nuestra historia haya sido un éxito para un público global. Y nuestros fans pueden estar seguros de que tenemos muchas sorpresas guardadas para la segunda temporada."
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