La polémica con el tema de la censura en 'Agony', por increíble que parezca, vuelve a ser noticia. Hemos llegado a un punto que es complicado de saber en qué punto está la situación por tantos cambios que ha habido al respecto para bien y para mal, así que lo mejor es que pasemos a recapitular rápidamente qué ha sucedido hasta el momento.
Primero se dijo que el juego de terror de Madmind Studio llegaría censurado, pero la versión para PC no gracias a un parche que se iba a poder descargar. Después se tomó la decisión de censurar esta versión para evitar que fuese prohibido. Más tarde un video trató de mostrarnos las escenas que fueron censuradas, pero también fue bloqueado. Finalmente se anunció una versión llamada 'Agony Unrated' para PC que se suponía que iba a ser publicada sin problemas y sin censura.
Sin embargo, como era de esperar que acabase ocurriendo por lo mismo que ha pasado hasta el momento, Madmind Studio ha comunicado que le resultará imposible publicar esta versión debido a problemas legales que ha llevado a la compañía a tener que cancelar su desarrollo por completo. Así han sido sus palabras:
Lamentamos informarles que nuestra compañía está sufriendo problemas financieros. Debido a razones técnicas y legales, Madmind debe cancelar el desarrollo de 'Agony Unrated'. Parte del equipo seguirá apoyando 'Agony' en Steam y en las consolas con nuevos parches.
En cuanto al parche de Xbox One, hemos logrado encontrar y corregir el error que había sido detectado en Xbox One X. Hemos enviado la actualización mejorada a nuestra distribuidora, quien se lo pasará a Microsoft hoy o mañana y esperamos que sea aprobado en los próximos días.
PlayStation 4, Xbox One y PC recibirán otro parche esta semana. Incluirá muchas correcciones y un sistema de iluminación perfeccionado.
Por lo visto, no nos extrañaría en absoluto que la semana que viene Madmind Studio salga a escena para decir que ha encontrado otra forma de publicar una versión sin censura de 'Agony' para que luego más tarde avise de que no podrá hacerlo. Desde luego, esto se ha convertido en el cuento de nunca acabar.
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